«Invertir en la infancia: romper el ciclo de las desventajas». 20-02-2013
Todos los Estados miembros de la UE han ratificado la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Las normas y los principios de la Convención deben seguir guiando las políticas y las acciones de la UE que tienen repercusiones en los derechos de los niños.
A través del Informe consultivo del Comité de Protección Social de junio de 2012 y de sus mensajes clave, así como de las Conclusiones del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (EPSCO) “Prevenir y combatir la pobreza y la exclusión social de los niños, y promover el bienestar infantil”, los Estados miembros reafirmaron su compromiso y acogieron con satisfacción la iniciativa de la Comisión de adoptar una Recomendación sobre esta cuestión.
Diversas políticas de la UE han tratado cuestiones relativas a la pobreza infantil y a la transmisión de las desventajas de una generación a otra, en particular en los ámbitos de la educación y la formación, la salud, los derechos del niño y la igualdad entre mujeres y hombres.
Si bien las políticas relativas a la pobreza infantil son principalmente competencia de los Estados miembros, un marco común europeo puede reforzar las sinergias entre los ámbitos de actuación pertinentes, ayudar a los Estados miembros a revisar sus políticas y a aprender de sus experiencias para mejorar la eficiencia y la eficacia de las políticas a través de enfoques innovadores, teniendo en cuenta las distintas situaciones y necesidades a nivel local, regional y nacional.
RECOMIENDA A LOS ESTADOS MIEMBROS: Organizar y aplicar políticas de lucha contra la pobreza y la exclusión social de los niños, promoviendo el bienestar infantil a través de estrategias multidimensionales, con arreglo a las directrices contenidas en la Recomendación “Invertir en la infancia: romper el ciclo de las desventajas”.